Hace varios días que hay una serie de
ideas que me están dando vueltas por la cabeza. Desde la teoría de los dos
demonios, a los atentados por lobos solitarios en EEUU y Europa.
Viene a cuento porque es imposible no
contemplar el crescendo de un clima social que empieza a mostrar enojo y hasta
atisbos de violencia en los últimos meses, en lo local, pero también la locura
desatada en otras partes del mundo. Locura con enorme difusión y locura que
pasa como reporte del tiempo. Doble vara acá y “allá”.
Aquí hay un obvio incremento de la
violencia revanchista, con gente que es tu vecino, tu compañero de trabajo,
bah, tu igual, que se alegra si perdes el laburo o quedas en la lona. Solo
porque pensabas políticamente distinto a él. Este pichi es el que tiene el
poder de vida o muerte via voto hoy. Antes apoyaban a las dictaduras (“algo
habrán hecho”, “aca hace falta mano dura y orden”), pero eran sujetos pasivos
en los golpes que otros ejecutaban. Hoy participan directamente entronizando a
la derecha ladrona y asesina via voto. Es grave esto. Porque legitima
situaciones institucionales de atropello a los derechos. “Dejalos gobernar! Uds
ya estuvieron 12 años, ahora nos toca a nosotros!” me han llegado a decir. Como
si la vida democrática e institucional del país fuese simplemente un
River-Boca, y no una construcción colectiva social.
El punto es que estas mayorías
circunstanciales fachas apoyan desde su revanchismo clasista un sistema social
injusto, excluyente, opresor y corrupto. En nombre de la democracia, la
república, la institucionalidad y no nos olvidemos, ¡la honestidad!
Lo triste es que estas mayorías
circunstanciales que se alegran tanto ante las desgracias de los que apoyamos
gobiernos populares, son tan victimas como nosotros de las aves rapaces que
ponen en el poder. Un caso digno de ser analizado. Pero que se repite a nivel
mundial. Un impresentable Donald Trump a punto de tomar control sobre los
botones de los silos nucleares. Un Rajoy que es vuelto a ser elegido una y otra
vez. Un socialista francés que defiende la flexibilización laboral como un
derecho adquirido de las corporaciones. Una dama de hierro alemana que quiere
que las cuentas cierren con o sin la gente adentro, especialmente si es la
gente de otros países. Primeros ministros de derecha que fracasan, y que dan lugar
a ministros aún más de derecha. ¿Cómo es convencida la humanidad de votar a sus
enemigos? Quizás sea un síntoma de “protección evolutiva” pueden pensar algunos.
Como la creencia popular sobre los lemmings, que dice que cuando sus población aumenta
de manera no sustentable, se lanzan de a miles al mar, en una suerte de
suicidio colectivo que solo dejará a algunos individuos para repoblar la colonia,
preservando los recursos y la sustentabilidad del ambiente en que viven. La
verdad, no lo sé.
Solo sé que veo al mundo de cabeza.
La cuestión es que en un mundo tan
derechizado, el sentido común creado marca que la exclusión por “meritocracia”
es el nuevo orden lógico de las cosas. El leit motiv del neoliberalismo, bah.
Tenés lo que te merecés, de acuerdo a tus esfuerzos. Concentrate en tus logros,
esforzate, y obtene mejoras en tu vida. Un ethos profundamente individualista,
que nace de cierta concepción protestante sajona, que ve con pésimos ojos la
organización colectiva, “el populismo”, la lucha por el bienestar de la
sociedad en su conjunto, no de los meros individuos separados del todo, el
famoso "la Patria es el Otro”, bah.
La consecuencia de tal “sentido común”
excluyente es naturalmente un estado de resentimiento creciente de parte de los
excluidos.
Y este resentimiento se va a ir
manifestando de diversas maneras. Marchas, protestas de diverso tipo, desde
pacíficas a cada vez más violentas a medida que las masas excluidas se den
cuenta de que pueden montar un millón de marchas, petitorios, demostraciones,
que los unico que van a obtener, en el major de los casos, es ninguneo, burla, hasta
llegar a la repression lisa y llana. El ejemplo local es el ultimo
ruidazo/cacerolazo de la semana pasada, que los medios se encargaron de tapar
lo mas possible, y que diversos funcionarios minimizaron como minoritario, hecho
por sectores afines al ultimo gobierno casi que con fines destituyentes, o de
mero “poner palos en la rueda”.
En el orden internacional, hace ya cerca de dos
años que venimos viendo marchas de todo tipo, levantamientos de pueblos
enteros, en protesta por la ola de violencia institucional y policial contra la
minoría negra. Impunidad absoluta de policías de gatillo facil, filmados
asesinando sin causa o razón logica aparente, que salen del tribunal absueltos
por jurados de mayoría blanca.
En Europa hace DÉCADAS que los
inmigrantes de todo origen, pero muy especialmente los del Norte del Africa,
los de origen musulmán, y los africanos subsaharianos son humillados,
perseguidos, deportados, maltratados y utilizados para la mas vil explotación. (No
hay que olvidar que tambien los “sudacas” han sido objeto de similar
tratamiento, pero el acento se ha puesto en los grupos mas arriba mencionados) Europa
imperial no dejó de serlo solo porque ya no tengan imperios formales los paises
que la constituyen. Su profunda ideología de superioridad racial, intellectual y
cultural los hace ciegos a lo que su continente le ha hecho a todos los demás
donde ellos han puesto el pie. Son incapaces de comprender las heridas causadas
a otros y que esas heridas son el origen de la pobreza y las catastrofes que
empujan al inmigrante precisamente a emigrar. Y hablamos de aquellos que deben
emigrar. Los refugiados son harina de otro costal, si se quiere aun mas vil,
porque son las guerras patrocinadas por Europa las que los causan, con el
tendal de muertos en los paises de origen y durante el peregrinar hacia tierras
mas “seguras”. Y la conclusion en este ultimo punto es más terrible, porque las
propias leyes europeas les permiten deportar inmigrantes ilegales, pero les
deben asilo a los refugiados. Sin excusas. Legalmente tienen el derecho de ser
acogidos.
Sin cupos, sin trabas, sin peros.
Todas estas injusticias cometidas de
abajo hacia arriba tienen una sola conclusion logica y es la igual respuesta de
signo contrario.
Protestas legítimamente por tus derechos
conculcados, te pegan, te revientan, no te escuchan. Vas a la justicia, se te
rien en la cara, y los que te han dañado salen como si nada por la otra puerta
porque pagaron o son amigos del juez. Y habrá quien quiera devolver la piña
social… Si no puedo tener comida en mi plato, si mi vida esta absolutamente
perdida, tanto si cumplo con la ley y normas sociales como si no, salgo de caño
y disfruto lo que puedo, cuando y cuanto puedo, pensará una parte de los
oprimidos. Es su forma de rebelión solitaria, individualista, como el Sistema que
los aplasta.
Otros saldrán a hacer otra forma de “justicia”.
Se subirán a un camion, o agarrarán un machete y cuchillos, un chaleco explosive,
o un rifle, y entrarán a matar a cualquiera. A cualquiera que identifiquen como
El Otro, el que les hace daño y los oprime. Y así tenemos pibes refugiados de
14 años que cargan machete en mano contra rubios ciudadanos del pais que lo
acogió, pero que contribuyó a ver su pais devastado, su familia esparcida y
muerta, y que al recibirlo, lo hizo con desprecio y humillación, con marchas
contra él, y todos los que son como él.
Y asi tendremos a belgas o franceses de
origen colonial, es decir de familias de las antiguas colonias europeas, hijos,
nietos, biznietos de los inmigrantes originales, que siguen siendo llamados “argelinos”,
“marroquíes”, etc. Nunca franceses. Nunca belgas. No son lo suficientemente
puros, lo suficientemente blancos. Crecen con ese stigma. En barrios alejados
del “centro”, de los que no pueden salir, porque fuera de esos monoblocks,
nadie les alquila a aquellos con “apellido árabe”. Tampoco los contratan para
trabajos especializados, aun si han podido llegar tras grandes esfuerzos a
obtener un título. Son pocos los que acceden. Son solo aquellos que pueden ser
mostrados como un triunfo de la cultura blanca que ha domesticado al salvaje de
las colonias, y que se regocija del ejemplo de su exito.
Despues vienen las sorpresas cuando estos
mismos pibes sin oportunidades, sin metas en la vida, humillados, sospechados
(como se sospecha aca de los pibes con gorrita, morochones), maltratados por la
cana, cuando viene alguien, y les da una meta, un objetivo, los convierte en “heroes”.
Se sorprenden cuando llegan un oscuro personaje (no por el color de su piel), y
les da un alto objetivo, por una causa noble les dice, que a lavez les
permitirá vengarse de los que tanto daño le han hecho a él y los suyos.
Es la sociedad misma la culpable de dejar
a estos pibes y pibas maduros para que los inescrupulosos los cosechen.
En EEUU resulta que mandan a un ciudadano
negro a pelear a miles de kilómetros por la causa de la libertad, de os
derechos humanos, de la democracia. Pronto se da cuenta que es todo verso, pero
Bueno, ya esta en el baile, es Buena paga si sobrevive y hasta quizás la
inalcanzable oportunidad de otro modo de llegar a tener un titulo
universitario.
Pero retorna y los servicios para
veteranos son una mierda. No lo contratan, porque ya se sabe, muchos quedan “tocados”
despues de haber estado “allá” y haber hecho lo que les ordenaron hacer (y mas
allá tambien), de haber visto lo que vieron. No son confiables. Y encima, un “heroe
del frente”, no cambia el color de su piel por haber estado en alguna Guerra imperial.
Sigue siendo un negro. Y la cana lo trata como lo que es…
Entonces un día se cansa de ver vecinos,
amigos, parientes, ser asesinados por un cana, y que el mismo salga indemne,
porque la justicia que vio el video y los testimonios del asesinato, considera
que fue legitima defense. Legitima defensa por la espalda. Legitima defense con
un policía arrodillado sobre la espalda del detenido, otro esposándolo, y un
tercero vaciandole un cargador en la nuca.
Citando a Perón, la violencia de arriba
engendra la violencia de abajo.
Todo esto constituye violencia de arriba,
violencia institucional. Apoyada por mayorías circunstanciales que por la razón
que sea, lavado cerebral mediatico, doctrina del shock en accion, etc, elige a
la derecha, sus tradicionales verdugos, como los custodios de su sociedad.
El resultado obvio de esta receta es,
claro está, el desastre.
Uno de los problemas es, desde mi punto
de vista, ver estas acciones aislada, como ataques de individuos movidos por
causas personales o ideologías extrañas a el pensamiento hegemónico (en este
caso, el occidental). Estas acciones deben ser vistas como acción y reacción de
sistemas sociales injustos, nacidos al calor del neoliberalismo
ultracapitalista de la ganacia sobre todas las cosas, el culto a los números, y
la ganancia financier sin productividad real. La acumulacion por la acumulación
misma, que origina burbujas financieras, guerras, desastres ecológicos para el
beneficio de unos pocos. La inequidad extrema es el meollo de la cuestión.
En diferentes regiones estalla por
diferentes motivos o excusas.
- La
supuesta implantación del Islam en una region (que en realidad es una
contrarrevolución armada desde occidente para contrarrestar un legitimo despertar
nacional e islamico en la region en los 80).
- El racismo que permea la sociedad
yanqui desde casi su origen.
- El clasismo y abandono del estado de
las capas mas pobres en casi toda Latinoamérica que da origen a las
bandas, que terminan siendo maras, bandas narco, o movimientos de
liberación fracasados que se terminan a veces confundiendo con los
anteriores.
Y asi podríamos seguir. El problema en
si, lo que ocasiona todo esto es la desigualdad, y la imposibilidad de
revertirla por medios pacíficos. Porque ese es el meollo de la cuestión. Las
corporaciones, los poderosos, colonizan cada estrato del entramado de poder que
les da acceso a los altos niveles de decisión. Los tribunales, los parlamentos,
pagan las campañas de los primeros mandatarios, a los cueles después poseen por
completo.
Uno vota, buscando equilibrar la
situación. Y en el caso de tener un candidato que realmente desea mejorar la
sociedad y hacerla mas equitativa, que gane las elecciones, uno ve como año
tras año lo destruyen. Su reputación, su entorno, su familia, todo es atacado.
Y si no lo pueden derrocar, al menos le hacen tanto daño, que es improbable que
pueda volver al poder. Y durante la gestión se encargan de oponerse a todo y
derribar cada medida progresista e igualadora llevada adelante. Cada cosa que
se intenta es trabada desde la justicia comprada. Se judicializa todo. Se
insiste en el republicanismo extremo, cada acto de gestión es inmovilizado. ¿Suena
familiar? Y, si. Lo es.
Mientras, cuando entra a jugar la
derecha, el gobierno es atendido por sus propios dueños, que no se deyienen
ante minucias como la aplicación de la ley. Y lo que antes provocaba furor de
perros rabiosos con la boca llena de espuma, ante cualquier hecho realizado por
el gobierno populista, sin quebrar bajo ningún aspecto las leyes, no despierta
ni una queja cuando se hace qubrando todo orden legal e institucional.
Este ciclo que vemos actualmente dentro y
fuera del país, de derechas que no dejan pasar una, que son incapaces de ceder
en lo mas minimo sus ansias rapaces, ya lo hemos vividoa aquí antes. Y provocó
la mas grande tragedia del siglo XX.
Los levantamientos armados de los 70
fueron producto de no encontrar justicia. De no ser escuchados. De haber sido
privados de toda herramienta legitima y legal para salir de la encerrona
avariciosa de las oligarquías ladronas
asesinas de nuestro país. No se trataba de jóvenes con “pajaritos en la
cabeza” que venían con ideologías locas que no cuadraban con nuestro sentir y
vivir. Que algunos, sobre todo los cuadros dirigenciales, hayan abrazado esas
ideologías para encuadrar su lucha es un poco anecdótico. Era una forma de dar una
coherencia intelectual, un plan de lucha y objetivos a una lucha para terminar
con la desigualdad que no podía ser barrida pacíficamente. No venían con la “cabeza
comida”, surgieron como respuesta a la opresión intolerable de décadas de
dominio de “los de arriba”. Y consideraron muchos de ellos que mezclando
doctrina de nuestros propios movimientos nacionales y populares, con visiones
de un mundo mas justo de otras ideologías, ponían un orden y una meta a su
revolución. Errados o no, eran la respuesta a un sistema injusto que se venía
perpetuando por generaciones. Cuando el agua no encuentra camino, se lo hace a
la fuerza.
Lo terrible de lo que sucede tanto aquí
como en el mundo, es que justamente esa situación de desesperanza, de no poder
acceder a cambiar minimamente situaciones de profunda injusticia, se está
repitiendo. Y las explosiones de violencia también.
Tengo miedo de que en algún punto, se
repita la historia acá. Nadie realmente quiere la violencia. Siempre el ser
humano, no el que esta en la cúspide del poder, si no los pueblos llanos,
tratan de evitar la violencia. Cuando recurre a ella, como en la Revolución
Francesa, es porque ha llegado a un limite insoportable de abuso por parte de
aquellos que son tan estúpidos que no comprenden que si repartieran tan solo un
poco de aquello que atesoran y acaparan, los pueblos volverían a su natural
estado de pacificación.
En que brete esta la humanidad toda, hoy,
no?